El texto que recogemos a continuación
sobre Bernardo Estornés, es un resumen de la biografía
escrita por Idoia Estornés, hija del mismo. Esta biografía
fue redactada en 1992, con motivo del Premio Manuel Lekuona que
otorga Eusko Ikaskuntza. Las fotografías que ilustran
este texto han sido extraídas de la misma obra
Bernardo Estornés Lasa nació
en la localidad navarra de Izaba en 1907. Recibió la enseñanza
primaria en su localidad natal, y posteriormente se traslada
a Zaragoza para estudiar en la universidad. La Escuela Superior
de Comercio de Zaragoza representa un cambio total: estudios
reglados, amistades, alumnado mixto. El descubrimiento de la
librerías y de las bibliotecas es sensacional. Caen en
sus manos los primeros vocabularios y gramáticas de euskera.
También comienza a conocer a los clásicos navarros
-Moret, Campión, Iturralde, Olóriz, Navarro Villoslada,
Sagaseta, Yanguas- y a rebuscar documentos en archivos. Inicia
asimismo sus primeros escarceos historiográficos nucleados
en torno al valle del Roncal. Fruto de sus pesquisas es la publicación
en 1927, con 20 años, de su primer libro, Erronkari,
primera monografía al uso sobre el valle natal.
Ese mismo
año se inscribe como socio-alumno de Eusko Ikaskuntza
cuyo conocimiento había hecho en el Centro Vasco-Navarro
de Zaragoza. Por esos años comienza a tratar a elementos
nacionalistas vascos de Navarra y a visitar "Eusko-Etxea"
de Pamplona, donde anuda buenas amistades con personalidades
como Ramón Goñi, los Aranzadi, los Urmeneta, Esparza.
Una de estas amistades, Angel Irigaray, le permite conocer y
visitar al admirado Campión. En 1929, recibe el título
académico.
La primera visita a Donostia,
la efectúa Estornés ese mismo año. Recorre
la ciudad, y acude a los Cursos de Verano de Eusko Ikaskuntza
cuyo secretario, Angel Apraiz, le ofrece un puesto vacante en
la misma. En diciembre de ese año es nombrado Jefe de
Oficina de la benemérita asociación, y unos meses
después, abría una céntrica Academia de
Comercio. De todos los contactos efectuados hasta entonces, ninguno
fue tan decisivo como el establecido con los socios y la Biblioteca
de Eusko Ikaskuntza. En ella, Estornés, entre otras cosas,
establecía el criterio de compras y auxiliaba a D. Julio
de Urquijo en la tarea de analizar y preparar los originales
de la "Revista Internacional de Estudios Vascos" (RIEV).

En 1930 toma parte en el V Congreso
de Estudios Vascos celebrado en Bergara, el cual no fue un congreso
"normal". Eusko Ikaskuntza acuerda la elaboración
de un Anteproyecto de Estatuto, el pronto controvertido Estatuto
General de Estado Vasco (EGEV) de 1931. Dicho informe sería
dado a conocer en el Congreso de Bergara. Estornés asistirá
a las reuniones preparatorias de este texto, siendo ya miembro
afiliado al PNV de San Sebastián. El 21 de junio de 1931,
las Comisiones Gestoras de las cuatro Diputaciones aprobaron
el EGEV de Eusko Ikaskuntza. No obstante, la militancia política
de Bernardo Estornés fue siempre discreta, ya que él
se movía con mayor naturalidad en actividades de tipo
cultural. Actividades como la publicación del texto escolar,
Sabin euskalduna, que tuvo gran éxito. Más
tarde, en 1933, da a luz su Historia del País Vasco,
con ilustraciones y mapa.
Fue
el éxito de estas publicaciones el que le empujó
a dedicarse íntegramente a escribir y editar. Entre 1933-1934
crea la editora "Beñat Idaztiak" y la "Colección
Zabalkundea". En 1935 publica Historia Vasca. Euskal
Edestia e Indumentaria Vasca. Pero el proyecto más
ambicioso de nuestro biografiado, rebasa el de una mera colección
literaria. Estornés traza entre 1935-1936, las líneas
de lo que sería su monumental "Enciclopedia General
Ilustrada del País Vasco". La guerra civil, sin
embargo, abortó este proyecto.
El Alzamiento sorprende a Estornés
en San Sebastián, mientras en Izaba él y sus hermanos
eran buscados por elementos de Falange. Tras la caída
de la capital guipuzcoana, un barco lo puso a salvo en Donibane
Lohitzune. Pero en Europa las cosas no tardaron en complicarse
y Estornés, recién casado con Ignacia Zubizarreta,
pudo embarcar hacia Chile.
Poco
después de afincarse en Santiago, creó la revista
"Batasuna", órgano de los vascos de Chile, que
es sustituida, en 1943 por una más política, "Euzkadi",
en la que también colabora. A pesar de la distancia de
las fuentes, siguió investigando sobre el país
y escribió obras como "Ekin". En 1958 la familia
Estornés-Zubizarreta, embarca rumbo a Europa. En Buenos
Aires quedan los originales de una segunda obra de Estornés
publicada en 1959 por "Ekin": Eneko Arista, fundador
del Reino de Pamplona, y su época.
Al
regresar a Donostia, funda en pleno franquismo, la Editorial
Auñamendi, cuyas colecciones "Auñamendi",
"Azkue" y "Aralar" fueron pioneras en la
publicación de lo que durante un tiempo se conoció
como "libro vasco".
Asimismo en 1966 Euskaltzaindia/Academia
de la Lengua Vasca, nombra a Estornés, Académico
correspondiente de la misma.
En 1968 publicó el primer
volumen de su monumental "Enciclopedia General Ilustrada
del País Vasco", el proyecto que no había
podido acometer antes de la guerra. Un
proyecto que no vio concluido, pero que dejó bien encarrilado
en manos de su hija, Idoia Estornés. Esta enciclopedia
lleva ya publicados más de 60 volúmenes correspondientes
al "Diccionario Enciclopédico Vasco", "Enciclopedia
Sistemática" y "Eusko-Bibliografia", los
tres cuerpos de la misma.
En 1992 Eusko Ikaskuntza, le
otorga el Premio "Manuel Lekuona". Como suele ocurrir
en estos casos, los homenajes se multiplican. Al año siguiente,
su filial, Euskaltzaindia, le nombra Académico de Honor
de la corporación; la Feria de Durango le dedica un acto
público. Durante su larga vida, publicó 80 títulos,
todos sobre temas vascos.
Este gran historiador, publicista
y editor murió el 10 de agosto de 1999 en San Sebastián,
a los 92 años de edad. Sin duda alguna, fue y será,
una de las grandes figuras de la cultura vasca de este siglo.
Maria Agirre, periodista |