¿Puede la incineración de residuos favorecer el cáncer infantil?Escuchar artículo - Artikulua entzun

Pedro GORROTXATEGI GORROTXATEGI, Especialista en Pediatría. Centro de Salud de Beraun, Errenteria (Gipuzkoa)

1- Introducción

  Foto: www.escolasverdes.org
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a próxima instalación de dos incineradoras en el territorio histórico de Gipuzkoa ha creado un debate sobre la adecuación o no de dichas instalaciones para el tratamiento de los residuos urbanos. Diversas reflexiones se van exponiendo sobre estos temas en los diversos medios de comunicación. Desde el ámbito de la pediatría la prevención de las enfermedades es uno de los puntos fundamentales, tanto por medio de la vacunación como por medio de los consejos preventivos. Cualquier tipo de contaminación que pueda afectar a la salud de los niños es un motivo de preocupación para los profesionales de la pediatría. Este es el motivo de la redacción de estas líneas, que espero contribuyan a la divulgación de los conocimientos existentes sobre el tema y a una mejor información de la población.

2- Causas del cáncer infantil

El cáncer infantil se debe solamente en un 10% a factores genéticos1. Los restantes casos, es decir, el 90% son originados principalmente por carcinógenos ambientales. La inmadurez de los tejidos del niño hace que el daño producido por estas sustancias externas sea mayor y que los efectos nocivos, que en los adultos tardan años en manifestarse, en el niño aparezcan más precozmente2. El niño puede afectarse por los contaminantes ambientales en tres momentos de su desarrollo: por los efectos sobre sus padres en las células reproductoras (preconcepciónal), durante el embarazo (gestacional) y durante la infancia del niño (postnatal). Estos datos normalmente no aparecen en las historias clínicas de los enfermos con cáncer y son aspectos cuya cuantía desconoce la comunidad científica. Por ello existe un proyecto de la Unidad de Salud Medioambiental Pediátrica de la Sociedad de Pediatría Valenciana, financiado por la Asociación Española Contra el Cáncer y el Fondo de Investigaciones Sanitarias, que pretende avanzar en el conocimiento de los diversos factores de riesgo asociados a los cánceres pediátricos para conseguir su prevención a medio y largo plazo3.

3- Vulnerabilidad pediátrica

Los niños son uno de los grupos de la población que mayor riesgo tiene ante los contaminantes medioambientales por tres motivos principalmente:

1- porque sus sistemas corporales no están desarrollados, sus órganos son inmaduros y la capacidad defensiva es más limitada

2- porque proporcionalmente (por kilogramo de peso) comen más alimentos, respiran más aire y beben más líquidos que los adultos

3- porque su ritmo de crecimiento es más rápido lo que hace que en ellos se alcancen concentraciones más elevadas de sustancias tóxicas

Todo ello les hace más vulnerables ante la contaminación ambiental.4,5

4- Estrategias para la prevención del cáncer

En la prevención del cáncer, la más importante es la llamada prevención primaria, es decir, aquella dirigida a eliminar, o al menos reducir la exposición a los agentes favorecedores del cáncer, sean físicos, químicos o biológicos. Para ello hay dos vías, o bien evitar la introducción en el medio ambiente de nuevas sustancias tóxicas o bien eliminar o reducir los carcinógenos ya presentes en nuestro medio ambiente6.

5- Incineración y salud infantil

En la incineración de residuos sólidos se producen gases nocivos, partículas en dispersión que van a la atmósfera y cenizas residuales que pueden ser tóxicas para la salud. Una revisión exhaustiva sobre ese tema ha sido publicada en esta misma revista7 [http://www.euskonews.com/ 0264zbk/gaia26401es.html]. Aunque todos los contaminantes pueden producir efectos negativos para la salud los más peligrosos son los llamados “dioxinas” y “furanos”, destacando entre sus efectos los cancerígenos, alteraciones en el desarrollo físico e intelectual y alteraciones hormonales y reproductivas8.

Las dioxinas y furanos, aunque teóricamente se pueden formar por procesos naturales, como incendios forestales, su presencia en el medio ambiente está causada principalmente por la actividad humana. Las fuentes más importantes son los procesos de combustión industriales, las plantas incineradoras, los incendios industriales, domésticos y de vertederos de basuras y otros procesos químicos industriales9.

Foto: www.aguamarket.com
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La exposición humana se produce a través de la alimentación (carne, pescado, leche, huevos y sus derivados) y también, aunque en mucha menor escala, por inhalación y a través de la piel, se depositan en las células grasas y persisten en ellas entre 7 y 11 años. En apartados anteriores ya se ha comentado la vulnerabilidad infantil ante la contaminación vehiculada por los alimentos.

La OMS, inicialmente, recomendaba una ingesta diaria tolerable de 10 picogramos/kg/día, pero a partir de 1998 lo redujo a una cantidad entre 1 a 4 pg/k/día con la idea de, en el futuro, disminuir esa ingesta tolerable a 1 pg/Kg/día10. El estado español es uno de los de la Unión Europea con una mayor exposición e estos productos. Si las tasas de Alemania, Reino Unido y Países Bajos, no llegan a 1 pg/Kg/día, las de los Países Nórdicos no llegan 2 y las de Dinamarca y Francia no superan 2,5 el estado español tiene una exposición media en el rango de 3 pg/kg/día11,12. Cualquier tipo de industria que produzca entre sus contaminantes estos productos es un motivo de preocupación y este es el caso de las incineradoras de residuos sólidos. Aunque las emisiones de las modernas instalaciones sean notablemente inferiores a las plantas antiguas, al ser éstas una de las fuentes de estos productos, constituye un motivo de preocupación para el colectivo sanitario por sus consecuencias negativas para la salud.

6- Conclusiones

1- Los pediatras tenemos la obligación de participar activamente en la prevención de las enfermedades asociadas a los contaminantes ambientales.

2- La incineración de residuos puede ocasionar perjuicios para la salud.

3- Se debería buscar el método de tratamiento de basuras que menos efectos secundarios ocasione a la salud, independiente de su costo económico u otras consideraciones.

1Narod SA, Stiller C, Lenoir GM. An estimate of the heritable fraction of childhood cancer. Br J Cancer 1991; 63: 993-999.

2Ferrís i Tortajada J, Garcia i Castell J, López Andreu J, Berbel Tornero O. Factores ambientales asociados a cánceres pediátricos. Rev Esp Pediatr 1999; 55: 166-177.

3Ferrís i Tortajada J, Ortega García JA, Marco Macián A, Garcia i Castell J. Medio ambiente y cáncer pediátrico. An Pediatr (Barc) 2004; 61:42-50.

4Ferrís i Tortajada J, Ortega García JA, Aliaga Vera J, Ortí Martín A, Garcia i Castell J. El niño y el medio ambiente. An Esp Pediatr 2002; 56: (supl 6) 353-359.

5J, Ortega García JA, Ferrís i Tortajada, Ortí Martín A, López Andreu JA, Cánovas Conesa A, Garcia i Castell J, Aliaga Vera J, Alcón Sáez JJ, Beseler Soto B, Andreu Alapont E, Molini Menchón N, Navarro Vazquez I. Contaminantes medio-ambientales en la alimentación. Pediatr Integral 2002; 5: 69-76.

6Ferrís i Tortajada J, Ortega García JA, López-Ibor Aliño B. La etiología y prevención del cáncer pediátrico. An Pediatr (Barc) 2004; 61:1-4.

7 Tallon Aviles JM, Efectos de la incineración en la salud. http://www. euskonews.com/ 0264zbk/gaia26401es.html

8Ortega García JA, Ferrís i Tortajada J, López Andreu JA, Garcia i Castell J, Cánovas Conesa A, Berbel Tornero O, Ortí Martín A, Ferrís i García V, Beseler Soto B, Andreu Alapont E, El pediatra y la incineración de residuos sólidos. Conceptos básicos y efectos adversos en la salud humana Rev Esp Pediatr 2001; 57: 473-490

9Incineration and Dioxins: Review of Formation Processes http://www.deh.gov.av/industry/chemical/dioxins

10Agency for Toxic Substances and Disease Registry (ATSDR). Toxicological Profile for Chlorinated Dibenzo-p-Dioxins. Atlanta, Ga, 1998.

11Kogevinas M, Janer G, Dioxinas y salud. Med Clin 2000; 115: 740-8

12Seta N, Arfi C, Momas I. General population exposure to dioxins, human ubiquitous pollutants. Rev Epidemiolo Santé Publique 2000; 48: 281-93.

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2004/10/15-22