Paje. Óleo de Lorenzo Aguirre.
A los once años de edad iniciaba en Alicante sus estudios pictóricos con el famoso pintor alcoyano Lorenzo Casanovas, del que recibe una buena orientación que le serviría de mucho en su profesión de buen pintor. Tres años después, en 1899, se trasladó a Madrid para ampliar sus conocimientos, asistiendo a las clases de la Escuela Superior de Pintura, Escultura y Grabado. En su constante deseo de no ignorar los secretos del arte, en 1901 se trasladó a la vecina capital francesa y en esta bella ciudad perfeccionó sus conocimientos, especialmente a cuanto se refiere a la escenografía, asistiendo a los talleres que poseía la Gran Opera. Es discípulo de los maestros Bailly y Gambón durante su permanencia en París. Concurrió a las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes celebradas en Madrid en los años 1904, 1915, 1920, 1924, 1926, 1930, 1932 y 1936. Obtuvo los premios siguientes: Tercera Medalla en la Exposición Nacional de Bellas Artes (Madrid, 1920) con la obra Luz divina; Medalla de Oro en la Exposición de Artes Decorativas de París (1925); Primer Premio de carteles anunciadores del VII Congreso Internacional de Oleicultura (1925) y Segunda Medalla en la Exposición Nacional de Bellas Artes (Madrid, 1930), con el retrato de Don Valentín Aguirre. Obras más destacadas: El onceno, no estorbar; Retrato de mujer; Lluvia de oro; Luz divina; Rosas de Té; Margaritas destrozadas; Crepúsculo de Vidas; Retrato de D. Valentín Aguirre; San Fermín y Paisaje de Madrid. Además de pintor, Lorenzo Aguirre, fue un artista polifacético: escenógrafo, cartelista, escritor, periodista y policía. Fallece en Madrid el 6 de octubre de 1942.