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EL PROCESO
El proceso seguido para la fabricación de una vidriera por parte de nuestro artesano es:
1.- Diseño.
De acuerdo con los deseos del cliente y una vez aceptado su encargo, se efectúa el dibujo sobre un papel. Se pone en el papel un número a cada color, para identificarlo y otro número (en rojo para diferenciarlo del anterior) para indicar la posición que ocupa. Es el momento en que se diseña la obra, teniendo en cuenta los espesores que ocupará el plomo en la unión.
2.- Realización de las plantillas.
Se hace el patrón, esto es, se saca una copia del dibujo y se corta todos los trozos del papel, de forma que así sacamos una plantilla para cada pieza. Generalmente usa para ello cartulina.
3.- Preparación del cristal.
Con ayuda de la plantilla se corta cada trozo de cristal (que llama “calibre”). El cristal es vidrio Glass, que compra en Alicante o Granada. Antes se podía comprar en San Sebastián, pero ante la falta de demanda hoy no. Son planchas de metro cuadrado y 3 mm. (aprox.) de espesor. Existe, como es lógico, toda una gama de colores, dibujos o aguas, etc.
4.- Pintado.
Si es necesario pinta el cristal. Para ello se ayuda de un poco de cera coloca un “calibre” en un caballete iluminado por detrás, y sobre él lo pinta con tierras y grisellas especiales.
5.- Horneado.
Se mete al horno (eléctrico) los cristales pintados, con el fin de que quede el dibujo fijado de forma permanente. Suele subir la temperatura hasta los 600 a 640º C. Luego hay que esperar que el horno se enfríe, sin forzar ya que ello provocaría la rotura del cristal que hubiera en su interior.
6.- Emplomado.
Sobre la mesa hace el planteamiento de cómo va a quedar la pieza terminada y posteriormente va uniendo los “calibres” colocando los plomos o “vergas”, que son 100 % de plomo.
Los plomos, que técnicamente se llaman “vergas”, son unas tiras a modo de dobles T que tienen ya las ranuras o “canales” donde se alojaba el cristal (los dos canales que forma la doble T están separados por un cuerpo que llaman “alma”).
Las vergas vienen en tiras, de unos 4 mm de espacio interior y unos 7 mm en la parte exterior, que luego el artesano los prepara según sus necesidades (tamaño del cristal a utilizar). Para ello cuenta con una máquina, que llama perfiladora o estriadora” en donde por medio de unos cojinetes deforma en frío la tira y logra las “vergas” al tamaño deseado, para lo cual cuenta con diversos juegos de cojinetes.
Las “vergas” tienen forma de doble “T” y pueden tener:
Medidas en función del tamaño. Así si una verga tiene un canal de 3 mm puede tener una anchura exterior de 5 o 6 y un alma de 3 mm.
Antes ellos mismos fabricaban las tiras de plomo para hacer las vergas. Para ello fundían plomo y el caldo lo pasaban a una lingotera que tenía 3 canales para sacar 3 tiras. Una vez fría, la tira se ajustaba en la perfiladora al tamaño deseado.
7.- Soldado.
Una vez emplomada la vidriera se sueldan con estaño (65 % de estaño y 35% de plomo) todos los bordes o extremos de las vergas. Terminada esta labor por un lado, se da la vuelta a la pieza y se suelda igual por el otro lado.
8.- Embetunar.
Tras el proceso anterior se le da un baño de betún. Este producto lo hace el propio artesano con aceite de linaza y blanco españa. Se deja secar y luego se frota con serrín retirando este betún. Con ello se logra que este producto entre en los huecos entre cristales y vergas y que al secarse y endurecerse dé consistencia y rigidez a la pieza.
No hay que olvidar que las vidrieras tienen una cara y una cruz y se crean para ser vista de un determinado lado
Cuando se trata de un vitral o vidriera grande, para su protección, para darle más solidez, en caso de puertas batientes o si se coloca en el exterior, por ejemplo, se recurre a varias soluciones:
A.- La colocación de varillas metálicas por detrás a la que se sujeta con alambre la vidriera. Esta era la solución clásica hasta que se sustituyó por los dos sistemas que explicaremos a continuación. Hoy apenas se ponen varillas a las vidrieras.
B.- La colocación en la parte trasera de un cristal “ESTADIT 3 +3”. Se trata de un cristal transparente construido con un cristal plano, una película de plástico transparente y otro cristal, que forman una sola pieza. Este cristal se coloca a la vidriera en la parte exterior, para su protección.
C.- Por último está la solución de meter la vidriera en el interior de un CLIMALIT (entre dos cristales), que luego se sella al vació por el borde. Con ello se forma un a modo de bocadillo con la vidriera en su interior.
Hace unos 20 años se puso de moda el usar en lugar de vergas de plomo unas que salieron de aluminio en color blanco u oro. El problema es que este material no admite curvas, por lo que se usaba para vidrieras de motivos geométricos.
Según nuestro artesano no son tan estéticas, ya que en ellas el aluminio llama mucho la atención, aparte de que como ya hemos dicho, no permite hacer curvas y dibujos artísticos.
A veces José Javier aprovecha el sitio que tiene libre en el horno para, como el mismo dice “jugar” deformando botellas de vidrio, hace ceniceros, y otros pruebas, algunas verdaderamente curiosas.
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