En Euskonews nos interesa su opinión. Envíenosla!
¿Quiere colaborar con Euskonews?
Arbaso Elkarteak Eusko Ikaskuntzari 2005eko Artetsu sarietako bat eman dio Euskonewseko Artisautza atalarengatik
On line komunikabide onenari Buber Saria 2003. Euskonews y Media
Astekari elektronikoari Merezimenduzko Saria
Superficie: 2.971 ha de Parque Natural y 548 ha de Zona
Periférica de Protección
Localización: Noroeste de Bizkaia
El Parque Natural de Armañón se sitúa en una de las zonas de carácter rural más marcado del País Vasco, siendo las actividades agrarias, y en especial las ganaderas, las que condicionan en mayor medida su paisaje. No obstante, el paisaje posee también destacables valores naturales de gran belleza, asociados a la litología calcárea dominante, que incluye roquedos, lapiaces, dolinas, grietas...
El subsuelo está surcado por una gran cantidad de cuevas de interesante valor arqueológico y espeleológico. Entre ellas destaca la Cueva de Pozalagua por la singularidad de sus estalactitas excéntricas y la Torca del Carlista, una de las mayores cavidades conocidas, con 500 m de largo por 125 m de altura.
Entre los bosques se conservan en la actualidad destacan los encinares, en las solanas, y los hayedos en las umbrías. Aunque, como ya se ha dicho, las formaciones arbustivas y herbáceas son las más frecuentes y características de esta zona de montaña.
La conexión de este territorio con amplias zonas forestales de Cantabria contribuye a aumentar su riqueza faunística, pudiendo ser considerada como un área de gran interés en este aspecto. Especies como el armiño y la ratilla nival poseen en Ranero su única cita en el País vasco.
A excepción del núcleo de Ranero, no existen núcleos habitados en el interior del área. La población de los dos municipios implicados alcanza los 3.144 habitantes en el caso de Carranza y los 534 en Trucios. La propiedad es mayoritariamente pública.
La principal forma de explotación de los recursos en el área de Peñas de Ranero - Los Jorrios es el sector primario y, dentro de éste, el ganadero es el predominante.
Existe un gradiente altitudinal positivo hacia una mayor extensificación de la ganadería, pudiendo distinguirse tres tipos de ganadería: vacuno de leche en los prados próximos a las explotaciones, concesiones (ocupaciones de los montes públicos por particulares con fines ganaderos o forestales) y pastos de altura, donde pacen rebaños de ovejas, equino y vacuno de carne. Por contra, el gradiente altitudinal es negativo cuando se refiere a la importancia económica de la ganadería.
Foto: Maider Sillero.
La mayor parte del uso forestal del área se produce en los montes de Utilidad Pública y en ellos, coexisten masas de crecimiento rápido con otras de crecimiento lento. Entre las primeras destacan el pino insigne o radiata y el eucalipto, que ocupan una importante extensión en altitudes inferiores a 600 metros. Las masas de crecimiento lento coinciden con los bosques de frondosas, generalmente hayas y quercíneas.
El área de Ranero-los Jorrios es una importante referencia para el deporte de la caza. Entre las modalidades y especies más apreciadas destacan: el jabalí, la becada (en pinares y robledales, fundamentalmente), la paloma torcaz y las malvices (en paso desde los collados que bordean Armañón), el corzo (rececho y batida) y la liebre.
Por otro lado, esta zona posee un enorme potencial turístico-recreativo, pese a que, debido a su situación geográfica, todavía es un entorno poco conocido para la gran mayoría del público y a la espera de ser descubierto. El tipo de relieve que caracteriza a la zona, con una parte central de formas alomadas y pendientes moderadas bordeada por las alineaciones montañosas de Peñas de Ranero, Armañón, Los Jorrios, Betayo (al norte) y montes de Ordunte (al sur), dotan al área de un carácter idóneo tanto para el desarrollo de actividades de tipo lineal: senderismo, montañismo, etc., como puntual, pic-nic, escalada, parapente, etc.
La ubicación estratégica del área de estudio para los patrones de vida que reinaban en el Paleolítico y posteriormente en el Eneolítico, cuando el hombre comienza a abandonar las cavernas, genera una enorme concentración de restos prehistóricos en la zona. El relieve accidentado y la presencia de desfiladeros son elementos favorables a la caza. La cercanía del mar y la existencia de numerosos cursos de agua eran asimismo variables muy importantes de cara a la elección de las habitaciones paleolíticas. Estas características, comunes a la mayor parte de la Cordillera Cantábrica, se suman en el área de estudio a un gran desarrollo kárstico. Todo ello determina la existencia en la zona de buenas condiciones de habitabilidad para el hombre prehistórico, lo que explica la presencia de numerosos restos: grabados, enterramientos, monumentos megalíticos... dejados por éste. Entre ellos destacan el Conjunto de grabados de Venta La Perra y los cromlechs, túmulos y dólmenes de las áreas de pastos entre Surbias y Armañón y la zona del Alto de Los Carcelares.
Por otro lado, la zona es asimismo rica en patrimonio histórico, tanto civil como religioso: casas-torre, ermitas e iglesias, etc; así como en elementos de arqueología industrial, en algunos casos ya desaparecidos: molinos y ferrerías, etc.
La opinión de los lectores:
comments powered by Disqus